Miedo al espejo

Las apariencias engañan y todo el mundo lo dice, pero parece que pocos lo asumen en su día a día. ¿Que por qué digo esto? Todos hemos dicho esa frase alguna vez y, sin embargo, nos preocupa lo que piensen de nosotros por nuestro aspecto y juzgamos el de los demás. 

Nos levantamos cada día y proyectamos una imagen con nuestro pelo, nuestro calzado y nuestra ropa, pero no siempre esa proyección se corresponde con lo que sentimos. Eso puede darnos una sensación de estar atrapados y deberíamos romper con todo. 

Mucha gente me ha dado su opinión, sin que yo la pidiera, sobre mis cambios de imagen. Cuando empecé a hacerme cortes radicales cada dos años muchos empezaron a ofrecerme sus aportaciones. Chicos diciendo que me queda mejor largo, chicas diciendo que con el pelo corto pierdo feminidad. ¿Quién les ha pedido esos comentarios? Y, como ya adelanté el otro día, este año llega el cambio más profundo. Pronto tendré la cabeza rapada.

Aunque lo tengo claro, también tengo miedo. Miedo a que la gente me mire con rechazo, miedo a que me traten como si les diera pena, miedo a que me juzguen antes de conocerme. No quiero que mi aspecto condicione mis relaciones sociales, pero tampoco quiero que el entorno influya en lo que deseo hacer.

Imágenes de Ramona Flowers, personaje de Scott Pilgrim contra el mundo.

Sueño con el día en que nos sintamos tan seguros de nuestra forma de ser que nos atrevamos a explorar todas las opciones ante el espejo. Las mujeres, sobre todo, tenemos una relación patológica con el aspecto. Nunca estamos contentas y no me parece lógico. 

¿Quieres teñirte de un color atrevido? ¿Cambiar tu forma de maquillarte o dejar de hacerlo? ¿Ha dejado de convencerte tu estilo de vestir? ¿A qué esperas para darle un giro de ciento ochenta grados a tu reflejo cada mañana? 

Por qué hacer algo que te asusta en cinco tips esenciales:

• Realización: conseguir una meta aporta una sensación increíble. 
• Orgullo: cuanto mayor es el riesgo, mejor es la recompensa, siempre podrás sentirte bien por haberte arriesgado al menos una vez, da igual el resultado.
• Fortaleza: las críticas bien asimiladas harán más fuerte tu carácter.
• Memoria: el cambio será un recuerdo de cómo fuiste para ser como eres.
• Borrón y cuenta nueva: es la mejor forma de darle un giro a tu vida, cambia de look.

 Afronta tu miedo al espejo y disfruta,

Nemea

Pastel a la taza de Dr. Oetker

Hoy voy a hablaros de algo rápido y extremadamente fácil. No es que sea perfecto ni que tenga un sabor maravilloso, pero si te apetece un bollo de chocolate recién hecho sin manchar ni cocinar, es una buena alternativa. El resultado de este pastel a la taza o mug cake es un bizcocho vertical de 300 calorías.

3 sencillos pasos para tener listo tu bizcochito de chocolate:

• Echar 50 ml. de leche en una taza junto con el contenido del sobre de la fotografía, el que yo he probado es de Dr. Oetker.
• Remover hasta que queda una masa homogénea.
• Calentar en el microondas durante un minuto y diez o quince segundos.

Después de dejarlo reposar un par de minutos ya está listo para comer. Como no me gustaba el aspecto que tenía en la taza decidí darle la vuelta y, no nos engañemos, no quedó perfecto porque parte se quedó pegado en el fondo.


OPINIÓN PERSONAL

• Buen sabor, aunque no espectacular. 
• Buena textura y temperatura al estar recién hecho. 
• Rápido y cómodo. Genial para un antojo.
• No lo haría muchas veces. Tal vez repita algún día, pero tampoco me ha impactado lo suficiente. Es un bollo normalito. 

DATOS FUNDAMENTALES

• Marca: Dr. Oetker. 
• Precio: 1 € y 39 céntimos. 
• Tienda: Hipercor.
• Tiempo total: 4 minutos aproximadamente (preparación + reposo).

¡Os presento mi torre inclinada de chocolate!

Siempre podéis decorarla un poco con bolitas de colores, semillas de lino dorado, lápices pasteleros, lo que se os ocurra. Yo lo hice sin decoración, hacer y comer sin más. Espero que si os animáis a probar algún otro sabor me contéis vuestra opinión.

Un abrazo,

Nemea

Paté de zanahorias y nueces

Me he basado en una receta vegetariana de paté de zanahorias para hacer tostas con un sabor que recuerda a la pizza. Por supuesto, este plato puede hacerse completamente vegano eliminando el queso que he utilizado o sustituyéndolo por queso de soja o similar.

Para que fuera menos fuerte, puse una cantidad menor de ajo. Así es más digestivo para cenar y no me afecta negativamente por mis problemas gástricos. Cambié la albahaca por orégano para conseguir ese toque de pizza.

INGREDIENTES

• Un puñado de nueces.
• Dos zanahorias medianas o una y media grande.
• Un diente de ajo pequeño.
• Orégano.
• Aceite de oliva virgen extra.
• Media pastilla de caldo vegetal.

Extra para las tostas: 

• Pan multicereales.
• Queso suave.
• Otros ingredientes al gusto.

ELABORACIÓN

Lo primero es poner a cocer las zanahorias en rodajas junto con la media pastilla de caldo vegetal. El tiempo varía dependiendo del tamaño de los trozos y de la intensidad del fuego. Yo recomiendo sacar de vez en cuando un pedazo y cortarlo, si se parte con suavidad está listo. 

Usar la batidora para mezclar las zanahorias, el orégano, el abundante aceite, el diente de ajo y las nueces. Batir hasta conseguir una consistencia para untar con facilidad. Yo lo que hago es probar el resultado y si su sabor es demasiado fuerte para mi gusto, ya sea por el aceite o el ajo, echo un vasito del caldo donde se han cocido las zanahorias.

Este paté se puede utilizar de muchas maneras: para mojar diferentes vegetales crudos o en tempura, como salsa para pasta, etc. Todo lo que se os ocurra. Yo os cuento mi idea de tostas utilizando queso suave.

Tostar pan multicereales y echar una capa gruesa de nuestro paté por encima. Por otro lado, calentar unos segundos unos trozos de queso suave para que sea más elástico. Esparcir el queso por encima de la tosta y directo a la mesa. El conjunto puede incluso recordar al sabor del tomate de la pizza, es un resultado bastante curioso.

Espero que probéis diferentes variantes. Lo mejor de la cocina es estimular la creatividad. La receta en la que me basé podéis encontrarla en el siguiente enlace: Vegetarianismo - paté de zanahorias.

¡Buen provecho!

Nemea

Prueba de muestras: Fiore di Pompeia, jabón íntimo

Hace tiempo el ginecólogo le mandó a mi tía el aceite íntimo Oleum di Pompeia, estaba pasando por una temporada de extrema sensibilidad y no sabía si podía deberse a los productos de la ducha, el material de la lencería o a una bajada de defensas.

La farmacéutica le recomendó que probase también el jabón Fiore di Pompeia y le dio muestras. Como se decidió a comprarse el frasco, me dio a mi una de las muestras por si quería probar. Nunca está de más probar diferentes productos para ver cuál es el más apropiado para cada cuerpo.

Hoy he probado la muestra y me ha sorprendido bastante lo líquido que es, muy acuoso. Parecía un poco de agua espesa más que un jabón. La sensación ha sido positiva, suave, un aroma curioso que no me recordaba a otros jabones más comunes.

Yo no tengo problemas de sensibilidad en general, salvo alguna vez por los cambios hormonales y la píldora anticonceptiva, así que no lo compraré de manera habitual, pero puedo aseguraros que si un día noto alguna irritación leve o molestia en general no dudaré en ir a la farmacia a comprarlo. Cuesta unos 15 euros y, por lo que he visto con el sobrecito de muestra, cunde bastante.

Cómo no, nos recuerdan en la parte trasera que hay que mantener una higiene diaria y, sobre todo, después de las relaciones sexuales y en los días menstruales.

El aceite Oleum di Pompeia me ha dicho mi tía que le dio muy buenos resultados, pero sin tener ninguna irritación o similar no veo necesario gastarse más de 30 euros en un tratamiento hidratante. Supongo que la sensación será agradable, si vuelvo a tener alguna molestia tal vez lo pruebe, aunque antes consultaría al ginecólogo, por supuesto.

Recordad siempre estos tres tips:

• Higiene diaria con un pH adecuado para la flora de la zona.
• Secarse siempre bien después de limpiarse para evitar infecciones.
• Acudir al ginecólogo con cualquier cambio en vuestro cuerpo y para una revisión una vez al año, no tengáis miedo ni vergüenza. Pensad que han visto de todo.

Un abrazo,

Nemea

Super Size me

Cartel del documental sobre McDonald's.

El otro día vi por segunda vez el documental «Super size me». La primera vez que lo vi tenía catorce o quince años y casi no me acordaba. Creo que merece la pena echarle un vistazo y volver a verlo cada cierto tiempo. En mi caso, decidí darle un repaso al darme cuenta de que a unos minutos de mi casa han puesto dos McDonald's, dos Burger King, un Taco Bell, un Telepizza, un KFC y varios sitios de comida rápida asiática.

¿Hasta qué punto somos conscientes de lo que comemos cuando vamos a un «restaurante» así? Llevo un tiempo analizando a la gente por la calle y tengo una teoría que compartir. Mi teoría es: gordura mediterránea vs. gordura americana. La gordura mediterránea se basa en tripa cervecera, caras con mofletes y, en general, algo más o menos proporcionado. Por otro lado, la versión americana consiste en grasa más expandida, michelines por todas partes, piernas muy gruesas, piel más colgandera. 

Mi impresión es que en los últimos años la gordura mediterránea está dando paso a la americana en España. Es bastante alarmante porque aunque tener sobrepeso no es bueno para la salud, siempre es menos malo estar «rellenito» que llegar al punto de la obesidad. ¿Tendrá algo que ver que los lugares de venta de comida rápida se estén multiplicando como los Gremlins al mojarse.

Para los que no conozcáis este documental de 2004: «Super size me» cuenta de manera detallada el día a día de un hombre, Morgan Spurlock, que decide comer comida de McDonald's durante un mes. Tres comidas al día y, siempre que se lo ofrezca la persona de la caja, debe elegir el tamaño gigante o tamaño Super size. 

Ese pequeño detalle me llama muchísimo la atención. Al ver los tamaños y compararlos con lo que vemos en los McDonald's de España solo puedo horrorizarme al pensar que no es porque se lo pidan para compartir entre varias personas sino porque se beben esos gigantescos refrescos (algunos de hasta dos litros) y se comen esas cantidades descomunales de patatas.

Si no me equivoco, al poco de ver la luz «Super size me» se decidió eliminar estas dosis sobrenaturales de calorías innecesarias para el cuerpo humano. Aceptaron que tal cantidad de refresco y comida era desorbitada.

Me quedo con una de las primeras imágenes del programa, cuando Morgan Spurlock se siente incapaz de terminar con la comida y se siente mal, muy mal. Más adelante su organismo se empieza a adaptar y ya no vomita al comer esas cantidades, pero su salud se deteriora día tras día.

Por otra parte, es muy alarmante la parte que dedican a la alimentación en los centros educativos. Niños que solo comen comida rápida, bollería y azúcar, azúcar y más azúcar. Dicen los representantes que enseñan a los niños a elegir correctamente, pero cuando se habla con los estudiantes y se mira lo que van a comer, lo saludable cae en el olvido.

El propio protagonista del programa se impresiona al ir cambiando de estado, ya que va viajando por todo Estados Unidos. Por lo que parece, en Texas todo es a lo grande.

Podéis echar un vistazo a estos pequeños artículos:

• La ciudad más obesa de Estados Unidos.
• La obesidad en los jóvenes de América Latina y Estados Unidos.
• El tamaño de los vasos de McDonald's varía en el mundo.
• Beber refrescos azucarados a diario durante un año.
• Comida sana como alternativa al McDonald's para los manifestantes de Hong Kong.
• El chef Jamie Oliver gana la demanda contra McDonald's.

¿Dónde está el límite? ¿Es la empresa la que debe poner cordura en sus raciones o son los consumidores los que deben elegir lo que más les conviene? En un mundo donde es más barato comer comida basura que comprar frutas y verduras, ¿cómo esperan que la gente se cuide cada día?

Las prisas, la economía doméstica y la adicción que crea este tipo de comida hacen que sea muy complicado llevar una dieta sana, sobre todo si tus ingresos son bajos. Ahora se extrañan de que haya niños obesos en zonas marginales, si lo sano no fuera tan caro esto no sería así, estoy segura.

En resumen, os recomiendo de todo corazón que veáis «Super size me», creo que es fundamental para ayudarnos a reflexionar sobre lo que aceptamos como algo normal en la alimentación y no lo es. Con esto no quiero decir que no coma nunca en estos sitios, pero comer una vez cada varios meses o semanas no es tan terrible, es un capricho insano, pero un capricho al fin y al cabo. Mientras aceptemos que es un exceso de un día concreto, todo irá bien. El problema es cuando alguien te dice, como me dice a veces mi primo: Sí, voy todos los fines de semana porque es lo único que podemos permitirnos mis amigos y yo, y nos encanta.

¡Bon appétit!

Nemea

Tratamiento: vital plus active

Este tratamiento, vital plus active, para combatir la caída del cabello es específico de farmacias. En internet he visto todo tipo de opiniones al respecto. Unos dicen que es un timo (muchos de ellos afirman no haberlo ni probado antes de juzgarlo, otros tienen experiencias muy malas) y otros creen que funciona.

Antes de juzgarlo lo probaré por mi misma y os daré mi opinión más sincera. Debo aclarar que no es un tratamiento precisamente barato, pero prefiero gastarlo en esto que en otras cosas. Basta con ahorrar un poco y quitarse caprichos tontos. Unos son más caros que otros, pero en la lucha por la salud de mi pelo voy a arriesgarme. 

En la farmacia te miran con una cámara y en la pantalla puedes ver el estado de tu cuero cabelludo. También te arrancan un par de pelitos para ver tu raíz. En mi caso salió una perfecta y otra muerta y sebo pegado. 

Champú, plus active, de la farmacia.

Va a ser la segunda vez que lo empiezo. La primera vez tenía buenos resultados, pero es muy constante y yo lo terminé abandonando. Ahora los productos han cambiado, el nombre y el envase. Lo único que no he dejado de utilizar en todo este tiempo sin tratamientos ha sido el champú, reconozco que de todos los que he probado es el que mejor le va a mi pelo y a mi cuero cabelludo.

Llevo tres años utilizando este champú, aunque de vez en cuando he descansado para que no se me acostumbre el pelo. En esos descansos he utilizado el Pantene purificante, porque me gusta su olor aunque no tenga caspa ni nada por el estilo, y el Pilfood para la caída. El de Pilfood lo probé porque me lo regalaron con las cápsulas que me recomendó el médico.

Pilfood: pack de cápsulas anti-caída con champú de regalo.

Esta noche vuelvo a comenzar. Lo primero es un líquido para antes de dormir, se aplica con un masaje el día antes de lavarse el pelo, actividad que recomiendan que se realice tan solo dos veces por semana.

Antes era Rougj Hair Active y los frascos eran distintos. La otra vez que lo hice fue durante unos meses (cuatro o cinco creo) cambiando el tratamiento según cambiaba mi cuero cabelludo y después me dijo la mujer que lo dejara durante seis meses, que había mejorado mucho, yo lo notaba bastante. Quedamos en que más adelante veríamos, ahí fue cuando perdí la constancia con el tratamiento. Lo dejé por completo. 

Haré un seguimiento de este tratamiento para contar mi evolución. No publicaré cada detalle diario sino que esperaré a ir acumulando información para hacer entradas más completas. Quiero poder resumir este tratamiento en un post o dos. 

Ya os contaré como me va.

Un abrazo,

Nemea

Cáncer de mama: 19 de octubre.

Un mes después del día internacional contra el cáncer de mama, he decidido hablar al respecto. No voy a hablar de lo clásico, creo que a estas alturas todas las mujeres deben saber que hay que hacerse revisiones periódicas y palparse en casa por si se nota algo extraño, ya sea por el color, el tacto o el dolor. 

Como uno de los objetivos fundamentales de crear este blog fue los complejos que tenemos en cuanto al pelo, he decidido hablar sobre los efectos de la quimioterapia y su forma de afectar a la mujer en su relación con el cabello. 

Pasas por una experiencia traumática como es un cáncer y, cuando parece que estás ganando la guerra, te dicen que por culpa del tratamiento vas a perder el pelo. Algunos te aconsejan que te rapes, así no lo verás caer mechón a mechón y tú te miras al espejo y piensas: lo que me faltaba, mirarme cada día al espejo y recordar que es una lucha constante. Ni una mañana de paz. 

¿Por qué es tan angustioso tener que raparse la cabeza? Si el efecto de la quimioterapia fuera un crecimiento extremo del cabello, ¿nos preocuparía? ¿Por qué nos afecta tanto nuestra imagen? Tal vez sea una bobada, pero creo que si más mujeres se lanzasen a raparse, el impacto en estas situaciones sería menor. A veces da la sensación de que si eres mujer y no tienes pelo o bien estás enferma o eres lesbiana o vete tú a saber, cuando este estigma social podría eliminarse simplemente con un atrevimiento por parte de más mujeres.

Puedes ser preciosa lleves el pelo como lo lleves y no tenemos que sentir lo contrario en ningún momento. Da igual qué circunstancia te lleve a alterar tu aspecto, es tuyo y de nadie más. Algunas se tapan con un pañuelo o una peluca, eso tampoco quiere decir que se avergüencen o que intenten ser de otra forma. Os sorprendería saber cuántas personas llevan peluca y nadie lo sabe. 

Hoy quiero ser rubia, mañana seré morena y los sábados me pongo de pelirroja. Las pelucas son muy versátiles y puede llegar a ser muy divertido cambiar de una forma tan radical el aspecto cada día. 

He vivido el cáncer muy de cerca, no solo el de mama, y he visto cómo puede llegar a afectar a las personas. Dejando a un lado que la batalla por la vida es diaria, cuesta mucho ser fuerte cuando todos te miran con: pena, condescendencia y lástima. Puede ser muy frustrante darte cuenta de que todo el mundo sabe que estás enfermo sin que hayas dicho nada. 

Si no fuera tan raro cambiar así de look, no costaría tanto pasar por ello. Por eso muchas personas se solidarizan con sus familiares o amigos con cáncer y deciden raparse al mismo tiempo. El apoyo que reciben con un gesto tan simple ayuda a que su lucha sea más llevadera. 

Ojalá el pelo no significase tanto en esta sociedad. Nadie lo pasaría mal por la calvicie, nadie se avergonzaría por sus canas, algunos dejarían de ocultar que se tiñen el pelo, otros cambiarían su peinado con menos miedo y, por supuesto, no sería una consecuencia negativa de la quimioterapia, solo sería una consecuencia más. 

Recuerda siempre estos cinco sencillos consejos:

• Quiere a tu cuerpo lo suficiente como para revisarte a ti misma cada pocos días.
• Quiérete tanto que las revisiones del médico sean un alivio como ir a un balneario.
• No dejes que nadie te mire con lástima, puedes luchar y puedes ser fuerte, hasta cuando tus fuerzas flaquean o tu imagen pasa por una mala racha. 
• No te escondas ni sufras por lo que la gente pueda pensar. 
• Ninguna enfermedad debe arruinar la imagen que tienes de ti misma. Estás perfecta independientemente del aspecto que tengas o el estilo que quieras llevar.

Os dejo como reflexión un corto de Paco León que se titula «La vuelta a la tortilla». Espero que lo disfrutéis y que más de una se anime a llevar las riendas de su apariencia sin tener en cuenta lo que está más aceptado socialmente.

Quiérete y cuídate,

Nemea

6 pasos para olvidar la contaminación del rostro

Vivo en una gran ciudad aunque, menos mal, algo retirada del centro. Cuando iba a la universidad pasaba todo el día entre los coches, el ajetreo y, sobre todo, la polución. Mucha gente no lo nota, pero como yo estoy acostumbrada a vivir apartada y pasar bastante tiempo en un pueblo del campo, me doy cuenta de cómo me cambia el pelo y la piel cuando paso varios días yendo a la ciudad.

El pelo se ensucia más rápido, la piel se reseca, los poros de la cara se llenan de porquería y, en resumen, todo lo que arreglas cuidando lo que comes, las cremas que te echas, etc., acaba estropeándose en cuestión de horas.

Por supuesto, solo se estropea la capa superficial, ya que si te cuidas las capas internas seguirán estando sanas, pero no puedes dejar que esa suciedad permanezca demasiado tiempo. El pelo es bastante fácil de solucionar, basta con lavarlo con un buen champú dando un masaje de presión en el cuero cabelludo, nada más llegar a casa. Cuanto antes mejor.

Para el cuerpo también basta con una ducha, un buen jabón o exfoliante y, al salir, unas gotas de aceite mezcladas con crema hidratante.

Podemos preparar nuestra piel de la cara para que el impacto sea menor. ¿Queréis saber cómo? Estos son mis trucos antes y después de pasar el día entre la contaminación de la capital.

Prepara y recupera tu piel en 6 pasos:

• Lava tu cara con agua muy fría. Cuanto más fría esté mejor. No te exfolies, ni te des un masaje en el rostro el día que vas a salir.
• Utiliza una crema cierra poros, yo utilizo una de la marca Rituals porque, aunque no es de las más baratas, con un par de gotas tienes para toda la cara. Cunde muchísimo el bote. Si no tienes una crema para cerrar los poros puedes utilizar una crema de día. Y, si tampoco tienes, no te preocupes, un protector solar te ayudará. Lo fundamental es que crees una pequeña capa entre los contaminantes y la piel, y si puedes protegerte del sol también, mejor que mejor. 
• Al llegar a casa, lo primero es lavarse con agua fría, para eliminar una parte de la suciedad antes de que se abran los poros con temperaturas más cálidas. 
• Utilizar un jabón neutro con agua templada.
• Si no vas todos los días, puedes exfoliarte con un suave masaje para limpiar en profundidad. No debes exfoliarte demasiadas veces a la semana. 
• Utiliza un tónico o una crema para piel sensible al terminar. 

«No debes exfoliarte demasiadas veces a la semana».

Disfruta de la gran ciudad, ¡pero cuida tu piel!

Nemea

Magdalenas veganas de vainilla y naranja

Tengo, desde hace un tiempo, curiosidad por la comida vegana y vegetariana. Yo como de todo y, aunque en ciertos aspectos siento rechazo hacia el trato que reciben los animales, sigo comiendo carne. Pero eso no quiere decir que no pueda probar diferentes recetas y compartirlas.

Tanto si eres vegano como si no lo eres, puedes disfrutar de este tipo de repostería. Sin lácteos, sin huevo y con mucha curiosidad gastronómica. En este caso, me he basado en una receta de cupcakes de vainilla y limón para hacer mi propia versión. Tened en cuenta que solo hablamos de la masa, la cobertura o el glaseado (frosting) corren de tu cuenta. Así podrás decorarlos y darle el toque de sabor que más te guste. Yo os recomiendo un toque de chocolate, me encanta la mezcla que hace con la naranja.

Por si no tenéis nada que hacer esta tarde de domingo, aquí tenéis la receta para hacer magdalenas veganas de naranja. ¿Nos ponemos manos en la masa?

INGREDIENTES

• 300 gramos de harina de trigo
• 2 cucharadas soperas de harina de maíz (maicena, maizena)
• 2 cucharaditas de levadura en polvo
• 1/2 cucharadita de bicarbonato
• 240 ml de leche de avena
• 2 cucharadas de extracto de vainilla (vainilla líquida)
• 1 cucharadita y media de vinagre de manzana
• 2 ralladuras de naranja (rallar la piel de dos naranjas)
• 200 gramos de azúcar
• 1/2 cucharadita de sal
• 50 ml de aceita de girasol o aceite de oliva suave

PREPARACIÓN

Primero cogemos la levadura, la sal, el bicarbonato y las dos harinas tamizadas y lo mezclamos un poco para que queden bien repartidos todos los ingredientes secos junto con la ralladura de naranja.

En otro bol echamos la leche de avena, la vainilla y el vinagre. Por otro lado, removemos el aceite y el azúcar hasta obtener una pasta uniforme que juntaremos con la leche. Para que la masa se mezcle bien podemos ayudarnos de la batidora o la Thermomix, lo que más cómodo nos resulte.

Mientras tanto, debemos ir precalentando el horno a 220º aproximadamente, que utilizaremos con el modo aire. Es el momento de juntar ambas mezclas, la preparada al principio con los ingredientes secos y la última. Hay que batirlo muy bien, debe quedar suave y con un color homogéneo.

A continuación llenamos los moldes de silicona o los papeles de magdalena que tengamos, más o menos un poco más de la mitad, os recomiendo que no los llenéis hasta el borde ya que puede desbordarse.

En mi caso, con esta cantidad de ingredientes, me gusta llenar ocho moldes de mini muffins y un molde pequeño de bizcocho. Así puedes hacer varias decoraciones diferentes, queda bastante bien poner el bizcocho en el centro y rodearlo de magdalenas. Tus invitados podrán probarlo antes de decidirse a cortar un pedazo.

Os diría un tiempo aproximado, pero depende mucho de los moldes que utilices. Como los que yo uso son bastante pequeños tardo muy poco en tener la tanda de magdalenas y diez minutos más para que esté listo el bizcocho. Lo bueno es que cuando llega el momento de sacar las magdalenas es cuando aprovecho para pinchar el bizcocho (puestos a abrir el horno, mejor cuantas menos veces lo hagamos).

Dejamos enfriar y ya puedes elegir entre crear tu propia cobertura o frosting o comerte el postre en su versión más light, aunque también es más aburrido tanto a la vista como al paladar. Es un clásico, cuantas menos calorías tiene algo, menos delicioso queda.

Este bizcocho no lleva ni leche ni huevo. 

DETALLE SALADO

Si te apetece más un postre salado o un aperitivo, la receta no cambia mucho. Reducid la cantidad de azúcar a 100 o 125 gramos y, en lugar de media cucharadita de sal, echad una entera. En este caso no os lo recomiendo sin cobertura. Podéis optar por algo sofisticado o por la versión más simple.

Usad el rallador para sacarle todo lo posible a un tomate, echad un chorrito de aceite de oliva virgen extra (a ser posible) y sal. Os recomiendo sal en escamas como la Maldon. Si cortáis las magdalenas en tiras finas horizontales tendréis un aperitivo perfecto: pequeños círculos cubiertos de salsa de tomate. Si tenéis en casa tomates cherry podríais improvisar unas mariquitas o cualquier otra figurita decorativa para adornar vuestro plato.

Para algo más elaborado, podéis optar por un frosting hecho con queso crema de soja o similar. Hay muchas opciones y estaré encantada de escucharlas todas en los comentarios.

MÁS INFORMACIÓN

La receta original de cupcakes de vainilla y limón también es vegana y podéis echarle un vistazo en el siguiente enlace: Pecado vegano.

Ejemplo de mariquita hecha de tomate: fotografía tomada de aperitivos de bichitos.

Leche vegetal: ¿por qué leche de avena en lugar de leche de soja? El oncólogo ha recomendado a mi madre, por su relación con los estrógenos y éstos con el cáncer de mama, que no tome soja. Por eso he decidido hacer esta receta para ella y así puede tomar la cantidad que le apetezca sin preocuparse. Además, también tiene intolerancia a la lactosa y puede disfrutarlo sin temor a que le siente mal.

¡Buen provecho!

Nemea

Pelo rapado: fecha límite

Muchas veces juramos que vamos a hacer algo que nunca llegamos a cumplir: «este año me apunto al gimnasio», «voy a ahorrar para ir de viaje el año que viene», «algún día probaré los insectos fritos». Mi frase fue «quiero raparme la cabeza al menos una vez en la vida», nadie me creyó, pero por dentro supe que solo necesitaba un empujoncito para hacerlo, y lo encontré. Se acabaron las excusas.

«Quiero raparme la cabeza al menos una vez en la vida»

Hace un año que terminé la universidad, no tengo trabajo estable (con la situación actual de España no es fácil), llevo casi tres años con mi pareja y necesito dejar de ver cómo se me cae el pelo aunque solo sea unos meses. Ha llegado el momento de llevar a cabo la tarea... bueno, todavía no.

Me raparé el pelo a finales de febrero de 2015. Justo después del tercer aniversario de mi relación, las navidades y, lo más importante, empieza a hacer menos frío. Raparse en diciembre es una locura, ¡congelación de ideas!

Dejaré que crezca hasta que llegue el día y mientras tanto voy preparando mi cuerpo para que el pelo nuevo salga más fuerte. Nuevas visitas al médico, mejor alimentación y más cuidados del cuero cabelludo. Tengo que aprovechar al máximo para que cuando me rape la cabeza esté más sana que una manzana y nazca con fuerza. Es muy deprimente ver cómo se te cae el pelo día a día, espero que esto le de un nuevo aire.

Propósitos para febrero de 2015:

• Haber mantenido una alimentación sana hasta la fecha para acostumbrarme.
• Medir el largo del pelo antes de despedirme de él. 
• Hacer una foto del antes y del después, eso que no falte. 
• Hacerme una coleta o una trenza y cortar por lo sano. 
• Raparme yo misma el centro de la cabeza, así no podré arrepentirme a medio camino y tampoco será culpa de otra persona. 

Creo que, ya que no es muy común que las mujeres nos rapemos la cabeza, al menos tiene que estar en mis propias manos. Muchos pensarán que es una tontería y que no es ni complicado ni extraño, pero desde que lo decidí rara es la persona que me ha dado su apoyo desde el primer momento. Ni uno solo me ha dicho que es algo normal, todos se quedan de piedra. ¿Por qué es tan raro que una mujer se rape el pelo? ¿Por qué nos anclamos tanto en el ideal de belleza? ¿Por qué parece que raparse el pelo quita feminidad?

En resumen, puede parecer una tontería, pero si navegas lo suficiente por internet y hablas con muchas personas te acabas dando cuenta de que no es algo tan normal y que muchas no se atreven porque no conocen a nadie que lo haya hecho o no se han topado con nadie que cuente la experiencia con detalle.

Paso firme. Con decisión. 

Ser femenina no tiene que estar reñido con el largo del cabello. 

Un abrazo,

Nemea

Estéticamente artificiales

Vivimos en un mundo visual. Nos bombardean a diario con imágenes por todas partes. Publicidad en la televisión, en las revistas, en las calles. Nos taladran tan a fondo los ideales de belleza que acabamos asumiéndolos como propios. Nos lo creemos con tanta fuerza que muchas personas acaban pareciendo iguales: mismo maquillaje, misma ropa, mismo pelo, etc. En cierto modo perdemos un poco del individuo para estar más cerca de la masa, para ser aceptados, para ser deseados incluso por nosotros mismos.

Yo casi nunca me maquillo y cuando lo hago me limito a usar pintalabios y remarcar un poco los ojos, y un buen día tengo que escuchar que un cualquiera me suelte: «Sin maquillar no vales nada». En ese momento solté una carcajada porque él nunca me había visto maquillada y solo lo decía para menospreciarme. Vamos, todo un encanto. Pero aquella frase se me quedó grabada y me hizo preguntarme si nuestro valor estético está únicamente sujeto a algo que no depende de la belleza personal. Dependemos del maquillaje, tintes, fijadores, secadores, planchas, rizadores y una infinidad de cosas más.

«Sin maquillar no vales nada».

Juraría que la expresión es que todo bebé nace con un pan bajo el brazo, no con gomina y sombra de ojos. Y los que dicen que «Dios nos hizo a su imagen y semejanza» qué creen que opinará su dios al ver que ocultamos nuestro aspecto bajo una máscara. ¿En qué momento dejó de importar la belleza natural? ¿Qué tiene de real conquistar a alguien si por la mañana al ducharse va a mudar la piel?

Una gran iniciativa, fotografías «al natural» de famosos.

Al ver fotos del antes y el después de una modelo, por ejemplo, me da por preguntarme:

«¿Cuántas mujeres creen que nunca serán tan perfectas como una modelo?»

«¿Cuántas podrían alcanzar esa "perfección" si tuvieran al mismo maquillador?»

«¿Cuántos complejos existen por manchas en la piel, bolsas en los ojos o pelo indomable?»

«¿Cuántos podrían eliminarse si desapareciese la publicidad y los retoques fotográficos?»

Recuerda siempre estos cuatro puntos:

1. Un rostro bonito lo es con o sin maquillaje. 

2. Los complejos no se eliminan pintando encima.

3. Cualquiera puede tener una «cara pefecta» con peluquería y maquillaje profesionales. Igual que puedes ser azul como en Avatar, rojo como en Hellboy o verde como la bruja de El mago de Oz.

4. Todas las personas, maquilladas o sin maquillar, valemos mucho más de lo que creemos.

Un abrazo,

Nemea

¿Quién soy y por qué estoy aquí?

Soy una mujer en la veintena, he terminado mis estudios, tengo pareja y vivo con mis padres. Me encanta disfrutar de la comida aunque no me gusta demasiado cocinar. Me siento bien cuando me cuido aunque me llego a aburrir y gasto bastantes horas en ello. Hago ejercicio, pero también me atrapa el sofá y la cama obligándome a tener épocas de sedentarismo extremo que lucho por evitar. Datos muy importantes: hay antecedentes de diabetes, hipotiroidismo y cáncer en mi familia, entre otras cosas. Tengo problemas gástricos y asma desde pequeña y, según parece, alopecia androgenética femenina. Además de vivir con bastante estrés e insomnio.

Ahora ya me conocéis un poco. ¿Empezamos?

Este blog comienza con la intención de hablar, especialmente, de temas sobre la salud de nuestra piel y nuestro pelo. Contaré mis experiencias en cuanto a cuidados y, además, compartiré recetas aptas para diferentes tipos de alimentación (normales, para celíacos, para veganos, etc.), siempre probándolas primero en casa.

Uno de los motivos que me impulsó a escribir sobre este tema es la escasez de experiencias contadas en internet por mujeres con el pelo rapado. Ahora que he decidido hacerlo, me extraña que tan poca gente lo haya explicado al detalle.

Cuando nos sentimos bien somos más productivos, nos concentramos mejor y nuestro ánimo es considerablemente más positivo. Como nos enseña el dicho: «mens sana in corpore sano». 

Elegí el nombre «Nemea» por el personaje mitológico, el león de Nemea, un animal con una piel y un pelo tan fuertes que ningún arma podía herirlo. Tan solo Hércules pudo poner fin a la vida de este animal y cuando lo hizo decidió protegerse con su pelaje como si se tratase de una armadura. 

Hablaré de cambios radicales, estereotipos, miedos, etc. Nos cuidaremos por dentro y por fuera, intentaré que olvidemos lo que nos mete la publicidad en la cabeza, nuestros ideales de belleza tienen que ser individuales. 

«Mens sana in corpore sano».

¿Habéis probado a poner palabras como «guapo» o «guapa» en las imágenes de Google o similar? ¿Habéis puesto alguna vez la palabra «belleza»? Es sorprendente que en casi todas las imágenes principales con esa tercera palabra salgan brochas, potingues, etc. Igual que si pones «cuerpo perfecto» podrás apreciar una ausencia total de vello corporal. Estos son los cánones con los que se mueve la sociedad, podemos estar más o menos de acuerdo con ellos, pero es una realidad. 

Al hilo de lo anterior, me parece bastante curioso recomendar la serie documental Brain Games, el otro día vi un capítulo dedicado precisamente a las leyes de la atracción física entre las personas y en cómo no siempre los que parecen guapos son los más atractivos. Una persona «normalita» puede tener precisamente la proporción áurea que hace que nos atraiga de verdad. 

No publicaré en «directo», prepararé diferentes entradas a lo largo del tiempo para poder publicar mis opiniones una vez experimentadas. Ya sean tratamientos o recetas de cocina, no puedo dar una opinión sin haberlo probado primero.

Que nuestra piel sea como una armadura, que tengamos todos una pizca del león de Nemea en nuestras vidas. ¿Lo intentaréis conmigo?

Un abrazo, 

Nemea